Alimentos para culturistas

18.02.2014 21:41

Estos alimentos se empezaron a fabricar hace unos 40 años para satisfacer las necesidades de los culturistas, que persiguen el perfeccionamiento físico mediante la obtención de la mayor cantidad de masa y tono muscular posible con una reducción simultánea de la grasa corporal. Al conver­tirse el culturismo en un deporte de masas, con la incorpo­ración de muchos millones de practicantes en todo el mun­do, la elaboración de productos creados "para ayudarles a conseguir sus objetivos se ha convertido en el mayor expe­rimento científico sobre nutrición y suplementación huma­na realizado en la historia de la humanidad.


El culturismo apenas tiene 60 años de vida y en los últi­mos 50 esta experimentación y evolución nutricional ha sido dirigida por los más famosos expertos en nutrición deporti­va de todo el mundo: desde la Clínica de Nutrición Depor­tiva Weider, en Montreal, Canadá, al servicio de la IFBB (Inter­national Federation of Body Building), con Federaciones nacionales en más de 170 países, hasta la Escuela de Medi­cina Deportiva de Estados Unidos, pasando por cientos de Centros de Alto Rendimiento Deportivo en todo el mundo.


Aunque en los espectaculares resultados obtenidos por los culturistas tienen muchísima importancia los avanzados sistemas de entrenamiento, de los que hablaremos en el capí­tulo 12, la base fundamental de su desarrollo muscular y de la eliminación total de la grasa corporal está en la nutrición y la suplementación. Pese a todas las críticas generadas por lo excesivo del desarrollo muscular alcanzado y por la posi­ble utilización de sustancias dopantes, lo cierto es que el cul­turismo y los nuevos conceptos sobre nutrición que ha ori­ginado han mejorado sustancialmente la salud y longevidad de millones de practicantes. Hay miles de culturistas y ex cul­turistas con más de 60 años y una forma física increíble. Y se espera que sean ellos los primeros que empiecen a batir récords de longevidad en los próximos decenios. Eso tenien­do en cuenta la enorme cantidad de errores que durante el proceso de experimentación y aprendizaje se han cometido.

Repitamos que el primer punto definitorio de la dieta iso- proteica consiste en incluir la misma cantidad de proteínas y algo de grasas en cada toma de alimentos. Así mantene­mos aminoácidos circulantes en sangre y favorecemos su asi­milación.

Ya sabemos que el período de circulación en sangre de los aminoácidos que nos proporcionan las proteínas es sólo de unas cuatro horas. Por tanto, el segundo punto definito- rio de nuestra dieta será tomar la dosis requerida de proteí­nas cada 3 horas aproximadamente. O sea, hacer cinco o seis pequeñas comidas proteicas diarias. En los casos extre­mos, de mucha obesidad acumulada durante años, pueden ser imprescindibles hasta siete pequeñas comidas al día.

 

Es muy frecuente que las personas obesas estén hacien­do justo lo contrario. En su afán por adelgazar, sólo toman una o dos comidas al día y casi siempre escasas en proteí­nas. ¡Y se extrañan de que no adelgacen